A 4 kms. de San Miguel de Allende en auto. Habitaciones cómodas y muy bien acondicionadas. Sin embargo, en el caso de la habitación asignada había un olor algo desagradable que provenía de las cañerías. El desayuno, aunque gratuito y vasto para los huéspedes (pan tostado con mermelada, café, jugo, huevos al gusto), no resulta tan atractivo ni acorde al valor (estimado).